Una de las decisiones que, más tarde o más temprano tenemos que afrontar es la de hacernos un Seguro que cubra nuestro propio fallecimiento.

Su importancia radica en que abre la posibilidad a que los beneficiarios de la póliza puedan afrontar un futuro con garantías económicas cuando el tomador no pueda contribuir a ello como consecuencia de su fallecimiento, una enfermedad grave o una invalidez.
La necesidad de protección es la primera de las razones para contratar un Seguro. Sobre todo cuando lo que queremos proteger es la familia y las personas que más queremos.

Esta es una decisión que está en cada uno, aunque hoy te vamos a dar unas buenas razones para contratar un Seguro de Vida.

Un seguro de vida es un contrato que garantiza la estabilidad económica del beneficiario en caso de fallecimiento o supervivencia al vencimiento. Éste se adquiere con una compañía aseguradora y se elige en función de las necesidades y objetivos del asegurado.

La cobertura depende de la aseguradora y de la póliza. Por ejemplo, el seguro de plazo fijo brinda protección durante un periodo específico de tiempo (como 10 o 20 años) mientras que el seguro permanente proporciona cobertura vitalicia.

Es importante señalar que debe elegirse la opción que convenga más a la situación familiar y económica de cada persona.

La razón principal para adquirirlo es solventar gastos en caso de enfermedad o fallecimiento, además de proteger a los seres queridos ante un incidente.

Entre las principales ventajas del seguro de vida se encuentran:

• Garantiza un patrimonio para la familia si faltara el asegurado.
• Está creado para cubrir diferentes necesidades, ya sea de protección, ahorro, retiro, etc.
• Protege en caso de accidente, enfermedad o incapacidad laboral.
• Se utiliza como una herramienta de ahorro a corto, mediano y largo plazo.
• Se obtiene una rentabilidad futura.
• Garantiza los estudios de los hijos, si se incluye en las condiciones de la póliza.

¿Qué tipos de seguro de vida existen?

Los seguros de plazo fijo, permanentes y universales son los principales.

Seguro de plazo fijo

Éste es el contrato más sencillo. El asegurado elige el monto de cobertura y por cuántos años mantendrá la póliza. Cuando ocurre una muerte durante el periodo establecido en la póliza, se paga una cantidad fija a los beneficiarios.

Este seguro es común cuando se necesita protección por una cantidad determinada de tiempo. Por ejemplo, mientras se paga la hipoteca de una casa.

Seguro permanente

Éste paga los beneficios tras la muerte, sin importar cuándo suceda. Mientras la prima se abone a tiempo, el seguro no tiene fecha de vencimiento e incluye una función de ahorro que permite incrementar el patrimonio o reducir el monto a pagar posteriormente.

Seguro universal

La principal ventaja es su flexibilidad para elegir la suma asegurada y hasta qué edad se desea pagar. Así, permite proteger a la familia o seres queridos dl asegurado, además de brindarle una mayor seguridad financiera.

Los beneficios de cada producto varían de una aseguradora a otra. Por esta razón, se aconseja acudir a un agente de seguros para conocer todos los detalles sobre la póliza antes de contratarla.

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